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Cerriles 2195

La situación del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Cerritos refleja una crisis interna profunda, marcada por divisiones, favoritismos y una falta de renovación en su liderazgo. Durante años, el PRI ha sufrido una serie de derrotas vergonzosas, en gran parte debido a políticas fallidas y a la perpetuación de un círculo cerrado de poder dentro del partido. En lugar de abordar estos problemas y castigar a quienes han contribuido a estas caídas, el partido parece premiar a los mismos individuos y sus familiares con puestos de alto nivel, perpetuando un ciclo de incompetencia y favoritismo. El fenómeno de las «familias políticas» dentro del PRI, que mantienen su influencia y poder a través de generaciones, ha sido un factor clave en la división interna del partido. Estas familias imponen a sus propios miembros, ignorando el talento y la capacidad de otros posibles líderes. Tal nepotismo ha llevado a la desconexión del PRI con sus bases y con el electorado en general, resultando en derrotas electorales que han sido difíciles de superar.

El descontento también se extiende a cómo el tricolor maneja la crítica y la oposición. Cuando medios como Plurinominal, (desde hace 18 años afín a la política izquierdista), señalan las estrategias fallidas del partido, en lugar de reflexionar y aprender de estos errores, los nuevos “lidercillos” del PRI arremeten contra los críticos. Esto demuestra una falta de voluntad para aceptar la responsabilidad y una incapacidad para adaptarse y mejorar. Sin embargo, la reciente alianza del PRI con el Partido Acción Nacional (PAN) y PRD, añade otra capa de complejidad a la situación. Si bien esta coalición podría ser vista como un intento de unir fuerzas para enfrentar desafíos electorales, también pone de manifiesto la incoherencia y la desesperación de los partidos. Las diferencias ideológicas y las rivalidades históricas entre el PRI, PAN y PRD; sugieren que cualquier victoria compartida podría ser efímera, ya que es probable que las luchas internas por el poder y los cargos resurjan rápidamente.

Gran parte del electorado, no solo en Cerritos, sino en todo el país, ve con escepticismo esta alianza, percibiéndola como una movida oportunista en lugar de una unión basada en principios y objetivos comunes. La imagen de los líderes del PRI, PAN y PRD, «muy de la mano» resulta ridícula para muchos, especialmente considerando sus pasadas disputas y la evidente falta de cohesión en sus plataformas y estrategias.

En conclusión, partidos como el PRI enfrentan un futuro incierto y complicado, atrapados en un ciclo de nepotismo y resistencia al cambio. Para superar sus desafíos, necesitará una renovación genuina en su liderazgo y una estrategia que no dependa de alianzas superficiales, sino de una conexión auténtica con las necesidades y aspiraciones del electorado. Sin estas reformas, el partido corre el riesgo de seguir perdiendo relevancia y apoyo, perpetuando su declive en el panorama político.

De cara a las elecciones del 2 de junio, se nota quien se ha desesperado al grado de recurrir más a las ofensas que a las propuestas, tanto que, más que mitines políticos parecen discursos religiosos, una doble moral que a algunos caracteriza. Y es que, por citar solo un ejemplo, destaca la escritura de un predio que sería utilizado para Casa del Adulto Mayor, en la prolongación de la calle Rafael Nieto, cuya titularidad ha suscitado controversia. Según documentos, cuyas copias también están en posesión de algunos ciudadanos, existe la solicitud de un certificado para otorgar la “donación gratuita condicional” a favor de Aurelia Orozco de González, en ese entonces representante del DIF municipal de Cerritos. El documento se firmó en Villa de Arista, el 29 de octubre de 1999. Este hecho ha levantado sospechas y críticas, especialmente después de que los paisanos de Chicago declararan, decepcionados, que habían enviado el dinero para la compra de ese terreno, para la construcción de un asilo en la calle Rafael Nieto, y que el trámite se realizara en favor del Honorable Ayuntamiento de Cerritos, no de un particular. Cabe aclarar que el Sistema Municipal DIF no tiene personalidad jurídica, no está descentralizado, por lo que de ninguna manera se podría poner un inmueble a nombre de alguna persona física y los paisanos hasta hace poco se dieron cuenta de esta maniobra.

La situación se agrava debido a que estos detalles fueron expuestos públicamente en un reunión, generando una ola de indignación entre los votantes que se sienten traicionados, por lo que perciben como un uso indebido de fondos destinados al bien común. La revelación, ha puesto en tela de juicio la transparencia y la ética de dicha administración, en una época donde tampoco se contaba con recursos para transmitir las sesiones de Cabildo en vivo, a través de internet.

Si bien la política es una lucha de inteligencias, en un país donde la libre expresión es un derecho y las redes sociales brindan la misma oportunidad para argumentar o debatir, un artículo de opinión o una línea editorial no definen la victoria. El triunfo en estas elecciones será para aquellos que puedan ofrecer una visión clara y positiva para el futuro de Cerritos, basada en hechos y propuestas sólidas.

Nos leemos la próxima…

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