Desconocían las disposiciones de la autoridad
Marco Serna
Porque se les acusó de haber profanado una tumba, 5 ciudadanos del municipio de Guadalcázar fueron detenidos el pasado lunes.
A Osvaldo Zúñiga Posadas, Roberto Álvarez Castro, Guillermo García Reina, Álvaro Torres Chiquito y Martín Torres Salas, se les hizo fácil abrir una cripta para dar cristiana sepultura a Plácido Banda, (mejor conocido como Bandita), pero como no tomaron en cuenta las disposiciones requeridas por autoridades, (principalmente de Salubridad), sacaron los restos de un familiar cercano al fallecido y los tiraron en un basurero.
Ese fue el pecado por el que duraron detenidos algunas horas en la barandilla.
El quinteto actuó por órdenes de los propios familiares, pero al parecer el Ministerio Público lejos de entender el fondo del asunto, más bien pretendía catalogar el acto como grave para fijar una cantidad considerable para liberarlos una vez que se los pusieran a disposición, aunque finalmente gracias a la intervención de funcionarios, se logró la liberación de aquellos que desde un inicio se dijeron inocentes.
“Bandita” murió víctima de un cáncer, sin embargo sus allegados ordenaron la apertura de una tumba de quien al parecer fuera esposa del finado “para meterlo a él”, como no contaban con un permiso expreso por autoridad correspondiente, sólo sacaron los restos y los tiraron.
Ante esto, el cuerpo del hombre que tuvo por encargo hacer el aseo de la plaza de Guadalcázar mientras vivía, permaneció tendido tiempo considerable después de celebrarse la misa de cuerpo presente.
Se explicó a este medio que la mayoría de los detenidos eran trabajadores del H. Ayuntamiento, sin embargo el Ministerio Público parecía no comprender el asunto, por eso fue necesario explicar el caso ante autoridades superiores.
Se dijo que los hombres pudieron salir libres poco después de las 15:00 horas si necesidad de haber sido consignados.
En la imagen, una mujer los visita mientras se encuentran tras las rejas.
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