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Personal del H. Ayuntamiento de Villa Hidalgo encabezó manifestación en Cerritos

  • Durante horario hábil «jefe» policiaco lideró al grupo de antorchistas

MARCO SERNA
«2 mil despensas, 400 toneladas de cemento, 2 mil cobijas, apoyos funerarios y consultas y medicamentos», son las exigencias del grupo antorchista que este miércoles 12 de abril se presentó ante el alcalde José Alfredo Sauceda Loredo.
Desde temprano, el grupo que presiona de esta forma en municipios potosinos fue encabezado por Luis Felipe Méndez Delabra, a quien se le ha visto dando órdenes en la Dirección de Seguridad Pública del municipio de Villa Hidalgo, por lo que se interpondría una queja para sancionar que en horario hábil, el personaje poblano aprovecha para encabezar manifestaciones, según indicó la autoridad municipal.
El hombre se acompañó de otros activistas, que se sabe, al igual que el alcalde Gabriel Gutiérrez Cortés han hecho del movimiento antorchista una forma de vida, y dejaron sus lugares de origen para encontrar cobijo en el ayuntamiento de Villa Hidalgo, desde donde intentan acrecentar el imperio en lugares como Villa Hidalgo, Villa de Arista, Cerritos, Cárdenas, Rioverde, Guadalcázar, Santa Catarina y Villa Juárez.
El líder Luis Felipe Méndez, al ser recibido por el alcalde cerritense aseguraba contar con personas de distintos barrios y colonias que participaban en la manifestación.
Al citar entre los inconformes a vecinos del barrio de Francia, el alcalde José Alfredo Sauceda Loredo exigió conocer los nombres de los manifestantes, lo que al momento no sucedió, concluyendo el edil que el grupo se conforma con personas acarreadas de lugares como Villa Hidalgo y Guadalcázar.
En la reunión, donde los antorchistas en tono enérgico acusaron al alcalde como «prepotente», José Alfredo les dejó claro que en las comunidades de Cerritos se está apoyando, y con pruebas en la mano exhibió documentos con cifras y proyectos.
El edil también recomendó a los antorchistas atender primero la problemática de Villa Hidalgo, antes de continuar con su forma de trabajo en Cerritos.
Con base en las presiones los de antorcha consiguen apoyos para distribuirlos entre su gente, a la que bajo cuotas la incluyen en el movimiento que luego se apodera de presidencias para llenarlas de fuereños, así como se observa en sitios como Villa Hidalgo, donde la presidencia se infestó con sujetos de Puebla, Oaxaca y del Estado de México, entre otros lugares.
Luis Felipe Méndez es criticado en Villa Hidalgo por los altos índices de inseguridad que han sucedido desde la llegada del antorchismo.
Estos van desde asesinatos sin resolver hasta abigeatos, robos con violencia en casas habitación, asaltos, borracheras y venta de droga en la plaza a toda hora, donde participan menores de edad, además de que se ignoran los llamados de auxilio que la gente le hace al líder de los manifestantes.

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